Mi hijo no quiere aprender a ir al baño: ¿qué hacer?


Por extraño que parezca, los niños algunas veces no quieren usar el baño porque les da miedo.

¿Esperas con ansias esa etapa de desarrollo en la que los niños se deshacen del pañal y aprenden cómo usar el baño?. Aunque algunos niños aprenden en pocos días, muchos otros tardan varios meses. Los niños algunas veces no quieren usar el baño porque les da miedo. Para algunos de ellos, la taza del baño es algo desconocido, demasiado novedoso, que deben evitar.


Como padres es importante no obligar a los niños a que aprendan rápido. Todo proceso en la infancia lleva un tiempo y depende de la madurez que tiene el niño. Si el tuyo ya va a la guardería, será más fácil que aprenda, pues tendrá como ejemplo a otros niños y querrá imitarlos. Aquí te dejo unos consejos fáciles y prácticos para que esta enseñanza sea acertada y divertida.


1.- Explícale por qué debe ir al baño
Existen muchos videos y libros que puedes escoger para facilitar a tu hijo/a comprender la importancia de ir al baño. Explícale el proceso de digestión de los alimentos y la necesidad que tiene el cuerpo de eliminar lo que ya no se necesita.


2.- Ten paciencia con los "accidentes"
Exagerar la gravedad de los "accidentes" puede hacer que tu hijo sienta un miedo excesivo de tenerlos, lo que puede provocarle ansiedad sobre todo el proceso. Mantente tranquila cuando tu hijo o hija moje sus pantalones o calzoncitos y haz todo lo que que sea necesario para la paz mental de ambos.
3.- Decora su bacinica
Aquí es donde puedes sacar provecho de las estrategias didácticas. Decora su bacinica con sus personajes favoritos, como superhéroes o princesas. Esto hará que tu niño se sienta feliz al tener un lugar suyo y único, desarrollando su confianza y seguridad.


4.-. Motívalo
Cada vez que logre hacer en su bacinica, festeja su gran logro. Dile frases como: "Lo hiciste muy bien", "Eres un niño muy inteligente" o "Ya eres grande". También puedes recompensarlo con detalles como abrazos, besos o una golosina.


Por último, es recomendable no darle líquidos en la noche antes de dormir. Recuerda que el niño no logra todavía controlar sus necesidades. Le puedes decir o aconsejar que si le dan ganas en la noche de hacer pipi o popo que te avise o puedes simplemente colocar la sillita de orín en su cuarto en un lugar que sea accesible cerca de él. Sin embargo, durante este tiempo de aprendizaje se recomienda que sigua usando pañales o pantalones desechables.


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Lo mejor es tener muchísima paciencia. Para ellos es un gran paso y no tiene sentido estresarlos más de la cuenta.




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